Endesa, a través de su filial renovable Enel Green Power España, ha instalado 240 refugios para aves, quirópteros e insectos en sus plantas solares, de los cuales 52 son cajas nido de rapaces repartidas entre las plantas solares de Málaga (La Vega I y La Vega II), donde se han instalado 10 de ellas; 26 en las instalaciones renovables ubicadas en Sevilla (Las Corchas, los Naranjos, Sol de Casaquemada, y Torrepalma); y seis en Huelva en la primera planta solar de Endesa en la provincia (San Antonio). Estas instalaciones ya acogen rapaces como cernícalos o mochuelos que se han avistado ocupando nidos en las instalaciones solares de Endesa.

La compañía sigue así integrando sus instalaciones renovables en el entorno en el que se ubican con el fin de crear «espacios de biodiversidad». En este sentido, a lo largo del pasado año, la compañía instaló en sus plantas solares nuevas medidas especiales de protección medioambiental, que «van más allá de los requisitos establecidos en los proyectos y permisos, con el objetivo de alcanzar una integración plena de las plantas renovables con el entorno», ha subrayado la empresa en una nota de prensa.

En esta línea, la compañía ha instalado, además de las citadas anteriormente, 78 cajas nido para paseriformes repartidas 20 de ellas en las plantas de Málaga, 50 en las de Sevilla y ocho en Huelva, con «un alto nivel de ocupación por algunas especies, como la carraca europea». Del mismo modo, Endesa ha instalado 76 cajas nido para quirópteros, cuya población es necesario proteger por el papel fundamental que juegan en el medioambiente.

De estas cajas, se han instalado 24 en Málaga, 44 en Sevilla y ocho en Huelva, a las que se unen hasta 34 ‘hoteles’ de artrópodos. Estos refugios para animales invertebrados al que pertenecen insectos, arácnidos, crustáceos y miriápodos se reparten diez en Málaga, 21 en Sevilla y tres en Huelva. Su proliferación es «fundamental» para el ecosistema ya que sirven de alimento a la fauna que cada día está proliferando en el entorno de las plantas solares.

Para ayudar a su asentamiento en las plantas solares, Endesa ha instalado hasta 17 bebederos en las plantas solares y más de medio centenar de posaderos para aves. Estas medidas se siguen implementando a lo largo de este año con el fin de continuar fomentando la convivencia entre tecnología y medioambiente.

Asimismo, las instalaciones renovables de Endesa han implementado medidas de mejora de la calidad del suelo y la vegetación; la última se acaba de realizar en las plantas de La Vega I y La Vega II en Málaga, con un refuerzo de la vegetación en más de 60 hectáreas donde se ha llevado a cabo un semillado con una mezcla de gramíneas y leguminosa, lo que favorece la formación de una cubierta vegetal diversa y resiliente, capaz de proporcionar refugio y alimento a la fauna esteparia de la zona, como aves y mamíferos entre los que destacan los lagomorfos y micro-mamíferos como los roedores.

Además, se han plantado bosquetes para ayudar a enriquecer el ecosistema, mejorar la integración paisajística y naturalizar el entorno. Esta medida ya se había aplicado en la planta solar de Endesa en Carmona, Las Corchas, donde se había recuperado con hidrosiembra y plantación de especies arbustivas y melíferas una extensión de nueve hectáreas para favorecer la vegetación natural que ayudara a su vez a la labor de del apiario en esta planta y que se convirtieron en las primeras colmenas solares en producir miel con marca registrada ‘Miel Solar energía de Endesa’.

«Todas estas medidas implementadas en el último año, más las que seguimos realizando, nos han llevado a avistar mayor número y diversidad de especies de aves que casi habían desaparecido de algunos entornos», explica Juan Abad, responsable de medio ambiente de las plantas solares de Endesa. «La convivencia entre biodiversidad y estas instalaciones es una realidad, ya no hablamos de teoría sino de la experiencia que estamos observando día a día en la evolución de la biodiversidad en el interior de nuestras Plantas fotovoltaicas. Estas instalaciones lejos de constituir amenazas para el medioambiente suponen verdaderas oportunidades para impulsar medidas de conservación y establecer refugios para la biodiversidad», ha sentenciado.

Endesa, a través de su filial renovable Enel Green Power España, gestiona en Andalucía 392 MW solares, y en estas instalaciones realiza medidas para la protección del medio ambiente, además de haber puesto en marcha estudios de compatibilidad de la mano de entidades de prestigio como Migres o EMAT. Asimismo, Endesa está llevando a cabo con la Junta una colaboración para poner en marcha un programa de investigación, formación, transferencia tecnológica e innovación en el ámbito agrícola y ganadero para fomentar las actividades del sector primario, uno de los principales motores socioeconómicos de los entornos rurales, en los proyectos de generación renovable de Endesa en Andalucía y para mejorar su modelo de cooperación con el entorno agrícola.