La Guardia Civil del Puesto Principal de Oleiros abrió una investigación a una mujer por presunta negligencia en el cuidado de su can, que falleció tras varios años de abandono.

Tal y como informó el Instituto Armado, el animal había sido trasladado a una parcela en la zona de Mera debido a las quejas de los vecinos por sus ladridos en el piso en el que vivía. Allí, el can permaneció hasta durante años «en condiciones deplorables».

La situación se conoció gracias a la preocupación de varios vecinos, que alertaron tanto a la Guardia Civil como a la Policía Local de Oleiros.

En concreto, los residentes habían observado al can inmovilizado en la finca, rodeado de moscas y avispas. Al llegar al lugar, la Guardia Civil confirmó las «pésimas condiciones» en las que se encontraba el animal.

Así, intentaron ofrecerle agua, pero el can, debido a su mal estado de salud, no pudo consumirla. La gravedad del caso llevó a la movilización inmediata de los servicios veterinarios. El can fue trasladado a un hospital veterinario de A Coruña, donde, tras evaluar su estado, los veterinarios se han visto obligados a practicarle la eutanasia humanitaria.