Casos clínicos

Caso 1

Suricata multípara de 5 años que acudió en shock 24 horas después de parir 4 crías sanas. Pertenecía a un criador y había tenido numerosos partos previos, sin cesáreas. Presentaba hipotermia severa (<35oC), debilidad, cianosis, abdomen distendido y timpanizado, y secreción vulvar sanguinolenta y maloliente. El estudio radiológico mostró dos fetos, gas en sendos cuernos uterinos y sistema digestivo fetal, y neumoperitoneo. Además, la ecografía manifestó asistolia fetal y ascitis materna. El análisis de sangre prequirúrgico reveló acidosis metabólica, azotemia, hiperfosfatemia y leucocitosis marcadas. Se realizó una ovariohisterectomía en la que se observó un desgarro en el cuerno uterino derecho y uteroverdina libre en el abdomen. Se realizaron varios lavados peritoneales. No se observaron malformaciones evidentes en ambos fetos. La suricata sobrevivió a la cirugía pero no se recuperó del estado de shock y murió tras 48h.

Caso 2

Hembra de tití pincel de 4 años que acudió de urgencia por presentar un parto distócico de un feto no viable en presentación posterior con exteriorización parcial por el canal del parto. El animal tenía antecedentes de parto eutócico 8 meses antes. Su dieta consistía principalmente en fruta y pequeñas cantidades de alimento de origen animal. Presentaba hipotermia (33ºC), debilidad, abdomen distendido y moderadamente timpanizado. La radiografía reveló la presencia de otro feto, neumoperi- toneo, falta de radiodensidad ósea y corticales tenues de los huesos largos. Además, la ecografía mostró el feto asistólico libre en el abdomen y ascitis. La gasometría no reveló alteraciones evidentes. Se realizó una laparotomía en la que se evidenció la rotura del cuello del útero prácticamente en su totalidad, se practicó una ovariohisterectomía junto con la retirada del feto extrauterino y se realizaron varios lavados peritoneales. Los fetos no presentaban malformaciones aparentes. El animal tan solo sobrevivió 72 horas tras la cirugía.

Discusión

La etilogía de ambos casos y su posterior presentación clínica son desconocidas. Los propietarios de ambos animales no permitieron realizar más pruebas.

Es posible que en el caso del suricata, un elevado número de partos previos pudiera vincularse con la rotura uterina². Los hallazgos observados sugieren un cuadro de abdomen agudo y sepsis por peritonitis secundaria a la rotura uterina, que pudo ser la causa de la muerte de la hembra gestante.

El tití pincel presentaba alteraciones esqueléticas en la radiografía que podrían ser debidos a un hiperparatiroidismo nutricional secundario, frecuente en titís mal alimentados5. El hiperparatiroidismo podría haber provocado una inercia uterina y causar la rotura de dicho órgano.

Conclusiones

La rotura uterina en titis pincel y suricatas distócicos debe considerarse una complicación potencialmente grave. Es recomendable un seguimiento veterinario de la gestación en estas especies.