Una nueva investigación apunta a un posible nuevo tratamiento para el cáncer de páncreas

Los investigadores de la Universidad de Cincinnati (UC), en Estados Unidos, han publicado un nuevo estudio que revela cómo una terapia combinada puede mejorar los resultados para los pacientes de cáncer de páncreas, según pubican en la revista ‘Molecular Therapy’.

«Estos hallazgos de la investigación nos ayudarán a liderar un ensayo clínico con un enfoque terapéutico combinado para tratar a los pacientes con cáncer de páncreas», dice Xiaoyang Qi, autor correspondiente del artículo, profesor de la División de Hematología Oncológica en la Facultad de Medicina de la UC y miembro del Centro de Cáncer de la UC.

Los investigadores de este estudio han descubierto que el uso de un compuesto terapéutico, llamado SapC-DOPS, una nanovesícula (o un sistema de administración de fármacos nanotecnológicos) hecho de componentes microscópicos de una célula, para administrar una terapia combinada de biomarcadores y quimioterapia estándar para el cáncer de páncreas puede mostrar beneficio para los pacientes.

«Solo un pequeño número de fármacos prometedores se dirigen al cáncer de páncreas, que es la cuarta causa de muerte por cáncer, con una supervivencia a cinco años de menos del seis por ciento», dice Qi, que ha desarrollado la investigación junto al asistente de investigación graduado Kombo N’Guessan.

«El cáncer de páncreas suele ser asintomático en las primeras etapas, mientras que con frecuencia invade los ganglios linfáticos y el hígado, y con menos frecuencia los pulmones y los órganos viscerales –añade–. Los tratamientos actuales, como cirugía, quimioterapia y radioterapia, no han logrado mejorar la supervivencia a largo plazo».

«Hemos descubierto un biomarcador dirigido a fármacos (fosfatidilserina) para las células de cáncer de páncreas en estudios anteriores, y uno de los tratamientos de primera línea para el cáncer de páncreas avanzado es la quimioterapia, pero solo proporciona mejoras marginales para los pacientes –prosigue–. Queríamos ver si podría usar el tratamiento actual de primera línea en combinación con la nueva administración de fármacos de nanovesículas para mejorar los resultados».

A principios de la década de 2000, Qi desarrolló SapC-DOPS, una combinación de una proteína celular, SapC, y un fosfolípido, DOPS, que se ensamblaron en pequeñas cavidades y pueden dirigirse selectivamente a las células y administrar terapias al tiempo que evitan todas las demás células y tejidos no afectados.

En el pasado, estudió esa nanovesícula en modelos animales con cáncer que examinan los cánceres de cerebro, pulmón, piel, próstata, sangre, seno y pancreático. Actualmente se está estudiando en ensayos clínicos para cánceres cerebrales.

En este estudio, los investigadores utilizaron modelos animales y células cancerosas humanas para probar esta teoría y descubrieron que la combinación de estas terapias juntas ayudó a identificar el biomarcador en la superficie de las células cancerosas en varios puntos de su ciclo de vida, inhibiendo en última instancia el crecimiento tumoral y potencialmente aumentando supervivencia, en comparación con los tratamientos solos.

«Este estudio muestra que el tratamiento combinado que usa nanovesículas y una quimioterapia estándar podría ser beneficioso para pacientes con cáncer de páncreas, posiblemente extendiendo vidas y ayudando a un subconjunto de pacientes con cáncer que no tienen muchas opciones», destaca Qi.